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Tecnología

Así termina la vida de los autos de prueba y desarrollo

Nos referimos a los modelos de preproducción que las marcas usan para desarrollar sus autos y homologarlos.

Así termina la vida de los autos de prueba y desarrollo

El fascinante mundo de los prototipos y las mulas de desarrollo en el mundo automotriz, da para escribir un libro ya que se trata de una etapa de ensayo y error, donde prueban mil componentes antes de la certificación final.

En una primera etapa, muchas piezas se prueban de manera experimental en autos muy lejanos al producto final, que pueden ser engendros creados solamente para suplir una estructura o para probar ciertas piezas. En estos casos se pueden tomar autos preexistentes que se recortan, se le sacan las insignias, se camuflan y se transforman en verdaderos laboratorios ambulantes.

En la medida que las piezas finales van siendo terminadas, estas mulas comienzan a dar pie a prototipos de preserie cercanos al modelo final. A veces, estos engendros se fabrican a mano o a veces en una partida de prueba en la línea de ensamblaje. Estos autos no son ni 10 o 20, sino que cientos de unidades que terminan en departamentos de acústica, interferencia, seguridad, pruebas mecánicas, talleres de diseño interior y exterior, pruebas en ruta y así. 

Cuando los modelos finales de preseriepara están casi listos iniciar la fabricación en masa, terminan en autoshows y en uso por los departamentos de marketing y publicidad, así como también son exportados para hacer pruebas de homologación en distintos mercados, pero ninguno está visado para su comercialización y por eso su destino final es ser destruido.

¿Por qué no se pueden comercializar estos prototipos? Por la sencilla razón de que se fabricaron bajo un protocolo experimental de pruebas, por ende pueden haber sido intervenidos por ingenieros o pueden aun estar sujeto a verificaciones finales. Además, estos autos no siempre tienen un numero VIN asignado. En síntesis, la marca no va a poner las manos al fuego por un auto que no salió íntegramente de la planta de montaje como un producto terminado y certificado.

La manera de deshacerse de esos autos queda a criterio de las marcas. Los más creativos han aprovechado estas instancias para anticipar el modelo en alguna pieza publicitaria o película, por ejemplo en una de las últimas películas de James Bond, donde 007 es perseguido por una horda de nuevos Land Rover Defender que eran unidades eran de pre serie. Otras marcas como BMW, prefieren el reciclaje.

30 años desmantelando prototipos

El Centro de Reciclaje y Desmantelamiento (RDC) de BMW Group comenzó casi como una chatarrería propia de la marca, pero con el tiempo fue transformándose en un "centro de excelencia" para el reciclaje de autos, acumulando experiencia que les permite incluso ponerse a la vanguardia de futuras regulaciones medioambientales.

En este Centro vienen a terminar su ciclo los prototipos de pre serie terminados de todos los autos del grupo. Imaginá un M5 o un XM y hasta un Serie 7, perfectamente terminados, siendo acarreados por grúas y camiones para ser desarmados y destruidos bajo un medido y estructurado proceso que permite identificar lo que se puede reutilizar, de lo que se puede reciclar y de lo que va a ser eliminado.

BMW Group fue fundamental en la creación de la plataforma IDIS (Sistema Internacional de Información de Desmontaje), en la que el RDC publica sus datos y hallazgos disponibles de forma gratuita para empresas de reciclaje de todo el mundo. Alrededor de 3.000 organizaciones en 32 países actualmente utilizan la base de datos conjunta de reciclaje para aprender cómo desmontar componentes reciclables de manera rentable y recuperar materiales valiosos de manera eficiente.

El proceso

El reciclaje de vehículos en el RDC comienza con la liberación controlada de los sistemas de retención y el bombeo de todos los fluidos. Con esto nos referimos a los sistemas de accionamiento pirotécnicos en los cinturones de seguridad y airbags, y del aire de los amortiguadores, entre otros, todo con procesos o dispositivos diseñados para esas tareas.

Durante la fase de desmantelamiento subsiguiente, el enfoque inicial es el reciclaje de componentes individuales. Los componentes funcionales que se encuentren en perfectas condiciones y con estado de serie no se desechan, sino que se pasan a distribuidores registrados para su reventa como repuestos autorizados. Durante el desmantelamiento mecánico del resto del vehículo, ciertos materiales, como el cobre de cables, se separan utilizando maquinaria especialmente diseñada. Una vez retirado el motor y la transmisión, el vehículo restante se prensa y se tritura en una instalación de reciclaje externa.

Los beneficios

El desmantelamiento dirigido de metales asegura que la chatarra de hoy se convierta en la materia prima de mañana, en la mayor medida posible y con la mejor calidad posible, algo importante desde el punto de vista ambiental y financiero. El desmantelamiento separado del convertidor catalítico también es económicamente eficiente debido a los valiosos metales preciosos que contiene.

La siguiente frontera son las baterías de los autos eléctricos, que es donde el RDC está concentrando todos sus recursos, para así aportar con nuevas ideas y soluciones a otros centros de reciclaje más masivos. 

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