Tal como sucedió en China y en Estados Unidos, la industria automotriz de Brasil trabaja para combatir el brote de coronavirus. Con la mayoría de las fábricas cerradas, el sector del país más grande de Sudamérica se volcó a la producción y reparación de maquinaria sanitaria, de acuerdo a lo anunciado en las últimas horas.
General Motors, Volkswagen y el Grupo PSA (Citroën y Peugeot) ya realizan diversas actividades con el fin de colaborar con el gobierno local para tratar de apaciguar la situación vivida en el país sudamericano con más casos detectados (2.554) y muertes (57) desde el brote del virus.
La labor de las fábricas
General Motors es la compañía insignia del grupo de trabajo que creó el gobierno de Jair Bolsonaro para reparar todos los respiradores que actualmente están fuera de servicio. Se estima que en el extenso territorio brasileño hay unas 3.000 unidades dañadas. Tras localizarlas y recolectarlas, GM espera que la próxima semana sea la del comienzo de la reparación, de la mano de un equipo de voluntarios que durante estos días está recibiendo entrenamiento virtual. La actividad se llevará a cabo en las distintas fábricas que la empresa tiene en el país.
Por su parte, Volkswagen trabajó en conjunto con los municipios en donde se encuentran sus plantas. Primero, ofreciéndoles una flota de 100 vehículos, con el fin de facilitar los movimientos del personal de salud. Luego, con la donación de 2.000 máscaras, las cuales ya se venían utilizando para la producción.
En cuanto al Grupo PSA, se encuentra trabajando en conjunto con una empresa especializada en la impresión en 3D para crear barbijos. Por el momento, el proceso se encuentra en estudio. En caso de ser beneficioso se comenzará con la producción, de la cual se desconoce el número de unidades a realizar.
