La impresión 3D está revolucionando la ingeniería gracias las nuevas posibilidades que ofrece, (por eso ya estamos viendo en algunos vehículos que esta técnica permite la creación de piezas hasta ahora imposibles) y la posibilidad de que puedan replicarse en distintas partes del mundo. Pero buena parte de esta revolución viene de la mano de la democratización de los medios de producción, que ponen al alcance de los particulares la posibilidad no sólo de fabricar sus propias piezas, sino de compartir sus diseños a la comunidad e irlas mejorando colectivamente. Uno de los resultados de esta accesibilidad global es esta acción solidaria llevada a cabo por una familia argentina, de la que te vamos a contar su historia:
Gerónimo Cabrera tiene 20 años, es estudiante universitario y fanático de la tecnología. En 2017 le pidió a su padre de regalo una impresora 3D para crear juegos y regalárselos a sus amigos, pero la sorpresa fue cuando descubrieron mediante un documental que con esta herramienta se podían hacer manos ortopédicas de diferentes tamaños, diseños y colores y de esa manera poder ayudar a los chicos a los que le faltara este miembro tan importante del cuerpo. Sin dudarlo arrancaron a hacerlo y así nació el proyecto Te Doy Una Mano.
Ya llevan hechas más de 400 manos que han entregado alrededor de todo el mundo. “Esto tomó una dimensión tan linda y tan grande que llegamos a entregar manos en Mozambique para amputaciones de la guerra con Portugal, historias de vida muy fuertes. Así como también fuimos reconocidos por el Papa Francisco en el Vaticano. Siento que con 20 años cambié muchas vidas y eso me hace muy feliz”, expresó Gerónimo.
“La modalidad es muy fácil. Nos contactan por las redes sociales de @tedoyunamanook luego nos pasan las medidas de su brazo, las fotos y videos para entender bien el tipo de mano que debemos fabricar y el diseño que prefieren. Podemos hacerlas de equipos de fútbol, de superhéroes, de princesas o de colores lisos para los más tradicionales, pero siempre pensando en que esa mano le de orgullo mostrarla y que no la esconda como suelen hacer cuando les falta”, detalló Guillermo Cabrera, el papá orgulloso que lleva adelante este emprendimiento junto a su hijo desde un pequeño taller de Banfield y hacia el mundo entero.
Gerónimo hace el armado de cada mano, Guillermo el forrado y el ensamble, es un verdadero trabajo en equipo. Cada mano lleva entre 30 y 40 horas de impresión (depende el tamaño de la misma) y también dependerá del diseño que se define con el niño o adulto que la haya solicitado: spiderman, batman, distintas princesas, equipos de futbol, o neutras.
Las manos suelen ser entregadas en el taller de Te Doy Una Mano, en la localidad de Banfield, aunque cuando el pedido es de varias manos de tal o cuál provincia o país, muchas veces Gerónimo y Guillermo han viajado con las máquinas para entregarlas y realizar el ajuste necesario en cada lugar.
Por otro lado, este año, Gerónimo quiso ir por mas y no fabricar solo prótesis de manos. Y comenzó a realizar portasueros de colores con superhéroes y princesas, para niños y niñas internados en Oncología de los hospitales de nuestro país. “En febrero de 2019 nació la idea de comenzar a hacer portasueros para los chicos internados en hospitales con el objetivo de darles la alegría de que recibirán los superpoderes de su super héroe favorito y de esta manera batallar la pelea que pueda darles el cáncer. El suero que te pasa este portasueros te va a dar fuerzas y te vas a poner bien, porque un super héroe jamás baja los brazos y gana todas las batallas”, contó orgulloso Gerónimo sobre su nuevo emprendimiento solidario que ideó este año.
Pero esta nueva acción solidaria tiene otro condimento más y no menos importante. Estos portasueros los hacen con la colaboración de los internos e internas de la Unidad 40 de Lomas de Zamora. Son talleres que se dan en el penal 3 veces x semana, entre 2 o 3 horas. “Cuando nos contactaron del Penal de Lomas de Zamora manifestando el interés de querer ayudarnos con los portasueros, no lo dudamos ni un segundo. Sabíamos que con esto no solo íbamos a ayudar a los niños hospitalizados, sino también a los internos del penal a pensar que estaban haciendo un bien para chicos que realmente lo necesitan. Y todo va super encaminado, nosotros los fabricamos con las impresoras 3D y ellos nos ayudan a ensamblarlos en el penal, están super comprometidos”, contó Guillermo.
Los portasueros son entregados en los hospitales de todo el país y los chicos internados eligen los diseños en ese momento. En muchas de estas entregas Gerónimo y Guillermo son acompañados incluso por celebridades para hacer de estas entregas una fiesta con los niños.
“Estamos dando vuelta las cosas y nos encanta… la gente nos dice que somos dos locos lindos solidarios x la vida. No somos una ONG, no somos una fundación. Somos padre e hijo tratando de ayudar a la gente. NO PEDIMOS DONACIONES, SOLO PEDIMOS DIFUSIÓN, que todos sepan que hacemos prótesis de manos y portasueros y que se las regalamos a quienes lo necesiten. La solidaridad te da amor y te da paz. Cuando un día hiciste reír a un niño internado en un hospital, al corazón es hermoso”, culminó Gerónimo.
Desde Autocosmos nos parece muy importante esta iniciativa, por eso si querés pasar la noticia, podés compartir esta nota y también contactarlos en Instagram, Twitter y Facebook bajo el nombre @tedoyunamanook
Proyecto Te Doy Una Mano