La empresa London EV Company o LEVC, como se le conoce en Inglaterra, es la responsable de suministrar a la capital británica de la nueva generación de taxis que, como ya casi todos saben, son eléctricos, y como pocos saben, son de propiedad china.
Sí, LEVC pertenece al consorcio chino Geely, la misma propietaria de Volvo, Lotus y muchas otras marcas. El gigante oriental postuló hace más de una década para fabricar los nuevos taxis londinenses y ganó. En 2014 decidió iniciar la construcción de una fábrica en la propia Inglaterra (Ansty) cuya inversión demandó 650 millones de dólares, para así acallar los resquemores que surgían de la tan flemática sociedad británica.
En 2017 presentó en sociedad el nuevo TX, una plataforma eléctrica que en su primera aplicación soporta los taxis británicos de nueva generación. Hoy están homologados para llevar hasta 6 pasajeros, con espacio para cochcitos de bebé, accesibilidad para sillas de ruedas, y ofreciendo servicio de wifi y conectividad para smartphones y laptops. La producción arrancó a fines de 2017 y a la fecha ya se han vendido 2.500 unidades.
La construcción es en aluminio y aceros de ultra resistencia, lo que disminuye el peso. En materia de movilidad, ofrece hasta 129 kilómetros de autonomía, pero la plataforma soporta un motor de combustión pequeño destinado exclusivamente a generar energía para recargar la batería. Así, el rango total es de 607 kilómetros.
A principios de año, LEVC anunció su intención de ampliar sus operaciones a Europa, e incluso se aventuró a decir que para 2022 el 70% de sus ventas se darán fuera de Inglaterra. Para ello está abriendo una oficina continental en la propia Frankfurt, algo que no debe tener muy contento a los fabricantes de taxis alemanes. Y utilizará la red y servicios financieros de Volvo Alemania para no duplicar infraestructura.
LEVC consiguió la homologación para sus taxis en varias ciudades europeas, entre ellas París, Oslo, Estocolmo, Copenhagen, y otras de la propia Alemania, incluyendo Offenbach y Colonia. Y ahora, LEVC se presenta en el Salón de Frankfurt con dos nuevos productos: una van de transporte y un furgón de carga, ambos 100% eléctricos.
El TX Shuttle es básicamente el mismo taxi londinense, con la misma capacidad para 6 pasajeros, pero algo más largo para poder cargar mas equipaje. Su objetivo es ganar licitaciones para transporte de aeropuertos, y ya hicieron una demostración hace unas semanas trasladando invitados VIP en las 24 Horas de Nürburgring.
El TX LCV (Light Commercial Vehicle) fue presentado en Inglaterra antes de desembarcar en Frankfur, pero sus ventas no se iniciarán antes de mediados de 2020. Tiene la capacidad para llevar hasta dos Euro Pallets, con los mismos niveles de autonomía del taxi y la van de pasajeros.
Pronto sabremos más de LEVC, porque su objetivo para 2024 es tener sus taxis operando en todas las grandes ciudades de los 5 continentes.
