Sabemos que Ford está ultimando detalles de su SUV eléctrica inspirada en el Mustang. Incluso hay rumores que la próxima generación del pony car podría recibir algún grado de electrificación. Como sea, todo está en pañales, ya que Mustang es sinónimo de nafta, poder y un enorme y rugiente V8. Un mal paso podría alienar a los amantes del auto estadounidense más icónico de todos.
Pero parece que los chicos de Charge Cars, una compañía británica con sede en Londres, piensan todo lo contrario y para demostrar que el pony car puede ser salvaje y amigable con el medio ambiente, se pusieron manos a la obra para combinar el estilo de un modelo clásico con un poderoso motor eléctrico.
Por fuera, este modelo que para muchos es una herejía, luce prácticamente como un Mustang fastback, con varios elementos inspirados en Eleanor (Gone in 60 Seconds). De hecho, para su construcción, Charge Cars habló con Ford, para obtener las licencias necesarias para construir este auto, por lo que prácticamente, estamos frente a tecnologías de nuevo siglo.
Pero esta inyección de modernidad, más que lo que puede estar equipado en el interior, queda constatado en el apartado técnico, ya que cuenta con dos motores eléctricos que en conjunto erogan 469 caballos y unos aplastantes 1200 Nm de torque (más del doble que un Shelby GT350). Al contar con tracción integral, anuncia una capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en 4s y alcanza una velocidad máxima de 239 km/h.
Por su parte, la batería de 64 kWh, proporcionada por el especialista Arrival le confiere una autonomía de 321 km y es compatible con una carga rápida CC de 50 Kw. Para tener todo bajo control, este pony eléctrico usa unos neumáticos de altas prestaciones Pilot Sport Cup 2.
Todo en este Mustang es electrizante, incluido su precio de 300.000 libras, unos USD 337.170… Por cierto, Charge Cars sólo fabricará 499 unidades.
Test Drive
