La renovación del Citroën C3 Aircross se lanzó para Argentina en la provincia de Jujuy, más puntualmente en los imponentes paisajes de la Quebrada de Humahuaca donde Autocosmos.com estuvo presente para tomar un primer contacto de manejo con el producto. Ya te contamos todas sus novedades (click acá para ver nota) ahora vamos a hacer un resumen con las primeras impresiones que dejó detrás del volante.
Luego de ver los cambios estéticos, me parece que algunos le sientan mejor y que otros. En el lado positivo está la parrilla que invade los faros dándole un toque más sofisticado, en el otro la parrilla principal quedó algo chica. La desaparición del auxilio del portón trasero –que se puede colocar opcionalmente en la versión más equipada- restó algo de look off-road, pero es mejor, después de todo es un vehículo aventurero y los SUV actuales abandonaron esa costumbre. Remata el uso del negro que eleva visualmente la parte baja dando la idea de mayor aptitud fuera de asfalto.
En la cabina las novedades son acotadas pero bien visibles con nuevos y elaborados tapizados, pero especialmente con la nueva placa que atraviesa el tablero, la pantalla táctil de 7” y las bocas de aire que siguen el principio rector de todo el diseño de cuadrado redondeado. Tuvimos oportunidad de subirnos solo a la versión con motor 1.6L 16V con VTi en sus dos niveles de equipamiento.
El Citroën C3 Aircross ofrece una posición de manejo alta, con asiento algo corto, apoyacabezas molesto por estar un poco adelantado y el volante levemente alejado, aunque utilizando todas las regulaciones posibles (altura en butaca y volante que también suma profundidad) se puede adaptar al gusto del conductor. La visibilidad de los grandes retrovisores es buena y completan sensores de estacionamiento con representación o cámara según la versión.
En velocidades urbanas el Citroën C3 Aircross se desplaza bien, tiene correcto empuje, buen confort de marcha y la nueva dirección eléctrica que es súper ligera. Ya en ruta se siente más lento, hay que pensar bien antes de un sobrepaso o bajar inclusive hasta 3º para tener toda la reacción del motor. Puntualmente en este caso tenemos en cuenta que manejamos a alrededor de 2.500 m sobre el nivel del mar, que resta potencia a los motores, y que el camino tenía muchas trepadas.
Citroën asegura que alargó las relaciones de caja del C3 Aircross 1.6L, durante el contacto pudimos ver que igualmente son cortas, viajando a 120 km/h (117 reales) con 3.500 giros. Aquí también debemos tener en cuenta la pérdida de fuerza por la altura, pero no creemos que viaje mucho más relajado a nivel de mar. Lo que si debemos ponderar es la buena insonorización de la cabina que filtra ruidos mecánicos y eólicos a velocidades altas.
Respecto de la estabilidad, viaja correctamente hasta 140 km/h y luego se pone un poco “bailarín”, algo normal para un vehículo alto y confortable orientado hacia el uso familiar. En los curvones puede doblar a más velocidad de la que uno supondría a priori, devolviendo un con un claro rolido que nos recuerda de qué tipo de auto se trata.
Esperamos tener pronto al renovado Citroën C3 Aircross en nuestras manos para realizarle una prueba completa y confirmar sus cualidades.
Todo sobre el renovado Citroën C3 Aircross