Si bien adoramos la combinación de motor y cuatro ruedas, el congestionado tránsito urbano hace pensar cada vez más en el uso de bicicletas, al menos para desplazarse por la ciudad. Ayer, el colapso sufrido por el sistema de transporte público, debido al paro de subterráneos, dejó esto demostrado cuando la Subsecretaría de Transporte anunció que el sistema denominado de “bicing” estuvo saturado en las horas pico.
Quienes recorrieron las calles porteñas aseguran haber visto a un número significativo de personas yendo y volviendo del trabajo, tanto en las bicis amarillas del gobierno, como en las propias, vestidos con la ropa del trabajo, incluyendo traje y corbata.
Según números publicados por un importante diario, la saturación del servicio de transporte público y de las calles, motivó que durante las horas pico la cantidad de viajes en el servicio de “bicing” pasara de 3.000 a 3.348.
¿Será este el punto de partida para establecer finalmente las bicisendas en la ciudad?
