Ford Motor Company se encuentra trabajando en la próxima generación del Focus, que debería salir a la luz en 2012.
En esta nueva generación se van a aplicar algunas soluciones de seguridad innovadoras que probablemente se conviertan en un sistema básico para todas las marcas en el futuro.
Se trata del airbag adaptativo, una solución que deja atrás las bolsas de aires uniformes para dar paso a una nueva generación que se adapta a la contextura física de los ocupantes. Algo por cierto, bastante sorprendente.
Para el airbag del conductor se ha desarrollado un sistema que reduce el inflado de la bolsa a la altura del abdomen y el tórax, evitando que quien haya sufrido un accidente sufra lesiones en esas partes del cuerpo. Vale recordar que se trata de golpes bastante comunes cuando la bolsa de aire se despliega repentinamente.
Por su parte, los airbags laterales para los ocupantes de las plazas traseras también se han visto beneficiados con innovaciones. Cuando estas plazas sean ocupadas por niños o personas de talla reducida, dejarán al descubierto unas ventanas que reducirán la presión de aire que reciben los airbags, para que se adapten a la contextura física de estas personas.
Si en las plazas traseras se sientan pasajeros cuyos hombros cubren las ventanas, estos se inflarán con mayor presión de aire para ofrecerles una mejor protección.
En lo que respecta a la protección del acompañante, este ha sido diseñado para ayudar a mejorar la protección de la cabeza y el cuello con una mejor fuerza de despliegue, coincidente con el tamaño del ocupante.
Este innovador sistema utiliza un dispositivo pirotécnico que puede ofrecer una presión de aire adecuada a la talla del acompañante. Para reconocer estos datos, el sistema tendrá en cuenta los ajustes que se hayan realizado en la butaca a la hora de tomar asiento y, a través de sensores, el peso del pasajero.