La marca del óvalo anunció la introducción por primera vez en la próxima generación del SUV Explorer que iniciará producción en 2010 de un cinturón de seguridad inflable diseñado para brindar protección adicional a los ocupantes traseros, que frecuentemente son niños o personas mayores y que son más susceptibles de lesiones en cabeza, cuello y pecho al momento de un accidente.
Una de las grandes ventajas del cinturón inflable es que distribuye las fuerzas de un impacto al pecho en un área cinco veces más grande que un cinturón tradicional, ayudando a reducir presión y mejorando el control del movimiento para cabeza y cuello. Asimismo, el 90% de los sujetos de pruebas manifestaron que encuentran más confortables estos nuevos cinturones, lo que podría ayudar a incrementar el uso del cinturón de seguridad en los pasajeros traseros, que tradicionalmente es muy baja, en EEUU es del 61% de acuerdo con la NHTSA, aunque si hubiera estadísticas en Argentina seguramente no pasaríamos del 20%...
Aunque el primer vehículo en utilizar esta nueva tecnología será el Explorer, Ford espera que eventualmente todos su modelos a nivel global puedan ofrecerla.
