¿Qué balance podemos hacer de estos primeros 9 meses del año?
El mercado de autos usados nos sorprende mes a mes. Hasta mayo las proyecciones de venta eran muy malas pero, a partir de junio comenzó un lento pero paulatino crecimiento.
Con un dato importante a tener en cuenta: agosto y septiembre fueron son los primeros meses del año, en el año, en el que crecieron las ventas en el interanual con 2008. En los primeros 9 meses del año se llevan comercializadas 976.900 unidades. Un volumen impensado hace algunos meses atrás.
¿Con qué volumen de ventas terminarán 2009?
Sin duda que llegar a fin de año con un volumen de venta aproximado en 1.250.000 unidades, nos lleva a pensar que en 2010 se recuperará el volumen perdido de este año- calculamos entre un 10 y un 12% -con respecto a 2008 cuando se vendieron 1.400.000 vehículos.
De todas maneras, el volumen de este año estaría por encima de 2006 –cuando explotó el mercado y se vendieron 1.220.000 unidades. Desde ese momento y por 2 años consecutivos, las ventas fueron récord histórico absoluto.
¿Qué está pasando con los precios?
Con respecto a los precios de los autos tengo que decir que están un 20 o 25% más bajos que en agosto o septiembre de 2008. Además, en ese período el dólar estaba en casi 3 pesos y ahora en 3,85 pesos.
Con este panorama, no creo que haya mejor oportunidad de compra que la que se está dando ahora, porque los precios son realmente seductores.
¿Esta tendencia puede cambiar en el corto plazo?
Sí, sin duda. Porque las terminales están poniendo fin a sus bonificaciones para la compra de autos 0km y comienza a ver demoradas de hasta 60 días en modelos puntuales.
Esto se da por el boom de ventas en Brasil y porque las terminales argentinas están comenzando a ver un buen horizonte en las exportaciones. Todo esto alimenta la demanda, y cuando el mercado está demandado los precios suben.
¿La crisis llevó a que las agencias de autos usados se hayan profesionalizado?
La gente al comprar en un negocio establecido recibe un valor agregado: la profesionalidad.
Poca gente conoce el trabajo que hace una agencia con cada vehículo usado que pone a la venta. La palabra revendedor, que se emplea para denominar a los comerciantes de automotores usados, transmite una imagen totalmente desactualizada en este sentido.
La crisis llevó a que el comerciante de automotores usados haya evolucionado en su profesionalidad y, actualmente, lo que ofrece corresponde a un estándar de coches en buen estado y sin ninguna sorpresa de papeles.
Es cierto que aún existen algunos casos de revendedores oportunistas y poco confiables, pero cuando se habla de agencias profesionales -es el caso de las agrupadas en la CCA a nivel país-, la realidad es totalmente diferente.
En estos casos el comerciante no se limita a comprar y vender, sino que además desarrolla toda una serie de tareas que se convierten en un importante valor agregado para el comprador.
¿Por ejemplo?
Seleccionan, chequean y, en caso de ser necesario, reparan o reacondicionan el vehículo; brindan asesoramiento y ofrecen la posibilidad de elegir y comparar con transparencia entre diferentes precios, calidades y modelos; regularizan multas, patentes, embargos, inhibiciones, cambio de radicaciones y transferencias; financian o gestionan la financiación para el interesado y se responsabilizan por vicios ocultos o por cualquier problema legal con la unidad.
¿Cómo se compite contra un "mercado" que no paga ningún tipo de impuestos?
Las agencias profesionales pagan IVA, Ingresos Brutos, Impuesto al Cheque, Ganancias y, además, asume la responsabilidad legal de garantizar el bien que vende.
Se podría pensar que sin esa carga tributaria, las operaciones entre particulares deberían resultar muy ventajosas para las partes. Sin embargo, esto no se ve en la práctica, donde los precios entre particulares difieren poco y nada respecto de los que ofrecen las agencias mencionadas.
El público ¿cómo identifica estas agencias?
Mediante el calco de la CCA que luce en el frente o adentro de las agencias y concesionarias socias. Simboliza la pertenencia a la Cámara del Comercio
Automotor y se ha convertido en un sìmbolo de servicio y tranquilidad para los clientes.
