Mercedes-Benz anunció la renovación de su modelo compacto Clase A. Un restyling que incluye mejores equipamientos y nuevas versiones encaminadas a reducir los consumos y las emisiones contaminantes.
Recordemos que este modelo es casi único en su configuración, al presentarse como la única alternativa premium en el segmento de los monovolumenes compactos, tales como el Fiat Idea.
Estéticamente podemos observar en el nuevo Clase A nuevos grupos ópticos, paragolpes y parrilla delantera. En el interior también se presentan ligeros retoques, pero quizá lo más importante sea la sustancial mejora del equipamiento: sistema de ayuda al arranque en pendiente, asistente de estacionamiento, luz de freno con destellos y alumbrado de emergencia entre otras cosas.
La gama mecánica tendrá novedades en los tres motores de acceso, mientras que los más potentes -A 200 y A 200 Turbo en nafta y A 180 CDI y A 200 CDI en diésel- permanecerán invariables.
A estos se incorporará el nuevo A 160 CDI Blue Efficiency 3p, versión que reduce el consumo medio hasta los 4,5 l/100 km (antes 4,9 l/100 km) y las emisiones de CO2 hasta los 119 g/km (antes 128 g/km).
Más adelante, llegarán los modelos nafteros A 150 y A 170 con función start/stop (sistema que para automáticamente el motor cuando el vehículo se detiene; una tecnología que inauguró el Citroën C3 Stop & Start), de modo que reducirán el consumo un 9% respecto a las versiones actuales.
El modelo se ofrecerá con carrocería de tres y cinco puertas, y tres acabados diferentes dependiendo del nivel de equipamiento: Classic, Elegance y Avantgarde. Éstos dos últimos vienen con llantas de 16 pulgadas y detalles en aluminio pulido para el Avantgarde y en madre para el Elegance.
Por Alejandro Marimán